No hace tanto tiempo que el televisor era un enorme armatoste que o bien se escondía como se podía en una esquina del cuarto o requería un mueble específico que rompía la armonía de la estancia. Afortunadamente esa era ha pasado a la historia, si vas a comprar un televisor este año, te encontrarás con que todos los fabricantes ofrecen modelos de cuidada estética que podemos montar donde queramos.
De todas formas, tampoco se le puede dar muchas vueltas: se mire por donde se mire, un televisor es básicamente un enorme rectángulo negro. Buscarle un buen encaje en la decoración del hogar no siempre es fácil, pero escogiendo el modelo adecuado y siguiendo una serie de pautas podemos transformarlo en una parte más del salón. O incluso darle un protagonismo visual sorprendente. Estos son nuestros consejos.